viernes, 2 de noviembre de 2012

Castillo de Burgalimar (Baños de la Encina, Jaén) برج

Empecemos diciendo una verdad incómoda: este castillo le conocí gracias a la serie de televisión Un país para comérselo, dicho lo cual, procederemos al normal desarrollo del texto...



Continuemos con algunas puntualizaciones sobre el nombre Burgalimar. Parece que todo el mundo viene a coincidir en que la traducción fetén es la de Castillo de los baños y que muy probablemente a los baños que se refiere estaban en la localidad de Baños de la Encina, situada al pié del castillo. 

Pero la palabra árabe برج (bury - hay que leer la y griega como consonante) literalmente significa torre (por ejemplo, el nombre del súper-hotel de Dubai es Burj al Arab) y la encontramos en otros topónimos como Bujalance, Burjasot o Albore (diminutivo de bury). Junto con el término hisn, se usa un poco indistintamente para nombrar construcciones defensivas, aunque es posible graduar el tamaño y la función de los edificios según hablemos de qalat, qasr, bury o hisn.

El castillo se encuentra en el antiguo camino del Puerto del Muradal, el que se usaba antes de que Despeñaperros se convirtiera en el paso desde La Mancha a Andalucía, allá por finales del s. XVIII y, por el tamaño que tiene, parece sugerir que tuvo una guarnición permanente para asegurar el paso de viajeros, como tantas otras fortalezas que cubrían la seguridad de las grandes rutas que salían de Córdoba.



Está construido en tapial y contaba en origen con quince torres de planta cuadrada, todas iguales. Ocupa la cima de un monte y tiene forma elíptica. Sus medidas son de aproximadamente 100 m. de largo en el eje mayor y unos 45 en el menor. Viene excavándose desde 2007 y se han localizado niveles desde la Edad del Bronce, lo que no es nada sorprendente... Todo el recinto iba rematado por almenas prismáticas, sin saeteras debajo de los merlones (como es corriente en las fortalezas almohades).





El conjunto estaba enlucido con mortero de arena y cal sobre el que se grabó un falso aparejo de sillares, dibujos geométricos de espiguillas, zig-zags y rombos; motivos que se encuentran en algunas estancias de Medina Azahara, datadas en el reinado de al Hakem II.

Toda la construcción muestra una evidente unidad, sin apenas añadidos posteriores y las cerámicas que se han encontrado en el interior van desde época emiral hasta la almohade) junto algunas monedas de Alfonso I el Batallador. Además ha proporcionado un epitafio sepulcral que se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional y una lápida fundacional que ha generado alguna polémica sobre su procedencia, en la que puede leerse:

Mandó edificar esta fortaleza el siervo De Dios Alhacam (II) Almostánsir bilá Emir Almuminín, cuya vida Dios guarde.
Medió (en la construcción) su cliente y gobernador militar suyo Maysur Benalhacam.
Acabóse (la construcción), mediante el poder de Dios y de su ayuda.
Y esto fué en el mes de Ramadán del año trescientos cincuenta y siete.



La lápida citada, según una imagen de la R.A.H. de 1.909. Archivo de la R.A.H. CAJ/9/7958/26(8)




El castillo se puede visitar sábados, domingos y festivos en siguiente horario, que es un poco caótico, parece tratarse de visitas guiadas: 10:15 h./ 11:00 h. / 11:45 h. / 12:30 h./ 13:15 h./ 16:15 h./17:00h./17:45/18:30 h.

De martes a viernes las visitas son a las 11 y las 12 h. previa reserva en Oficina de Turismo que está en la calle del Castillo, 1 ó solicitando cita en los teléfonos 953613229 / 658303429.

Para saber más:

- "El castillo de Burgalimar de Baños de la Encina (Jaén) y la lápida fundacional", de Juan Muñoz-Cobo. Boletín del Instituto de Estudios Giennenses, nº. 199, 2009, págs. 57-106.

El Camino Toledo Córdoba, según el Repertorio de Villuga

- Oficina de Turismo de Baños de la Encina

jueves, 20 de septiembre de 2012

Cortijo de las Mezquitas, Campillos, Málaga


Carlos Gozalbez Cravioto es el descubridor de una mezquita rural excepcionalmente bien conservada y que hasta ese momento, había pasado desapercibida para el ámbito científico, ya que el denominado Cortijo de las Mezquitas es en realidad una mezquita reutilizada como cortijo desde el siglo XVI.

Está situada en la unión del término municipal de Antequera con el término municipal de Campillos, muy próxima a la Sierra de Yeguas, en la provincia de Málaga. El acceso se realiza por la carretera de Antequera-Campillos y, a unos 7 kilómetros del cruce con la carretera hacia Sierra de Yeguas, está la bifurcación que llega hasta el mismo edificio. Esta posición, a unos 24 km de Antequera, a 5,5 de Campillos y 5 km de Sierra de Yeguas, era la ruta utilizada desde el siglo XIX para comunicar Antequera con la Sierra de Yeguas, un enclave estratégico que explica la importancia monumental de este edificio. Para explicar la construcción de tal edificio, algunos autores han propuesto que formaría parte de una ciudad que nunca se llegó a materializar, proyecto del estado omeya.



El asentamiento está constituido por una mezquita, su patio y un potente muro rodeando todo el perímetro, cuyo origen data entre los siglos X y XI (según parecen evidenciar los fragmentos de cerámica encontrada en las prospecciones), con una capacidad para unas 700 personas. Se trata de un edificio de tres naves, separadas por pilares, cuyos muros aún conservan los contrafuertes, de 40 ó 50 centímetros de ancho por 5,10 metros de altura, coronados por canecillos, ofreciendo una imagen potente, cerrada al exterior y completamente desornamentada.

Hay un importante número de arcos de herradura en diferentes partes del inmueble y muy especialmente en lo que podría considerarse el acceso al haram (compuesto por una serie de naves en las que se ha utilizado el tipo de arcos semejantes a los de las mezquitas de Córdoba y Madinat al Zahra). Otro elemento que define la monumentalidad espacial de esta mezquita es su patio o sahn, formado por un cuadrado casi perfecto de 28,25 metros de lado, que indica la importancia que tuvo este inmueble religioso en ese enclave rural.



El haram presenta una estructura cuadrangular de aproximadamente 30 metros, construida en mampostería, que delimita el espacio del patio y donde posiblemente estaría ubicada la sabil o fuente de las abluciones. Estaría definido mediante tres naves paralelas y transversales al muro de la quibla y por otras ocho naves perpendiculares a dicho muro, habiéndose conservado algunos de los arcos de herradura de separación de las naves, así como parte del alfiz que enmarca el vano de acceso al patio.

En cuanto a los materiales empleados hay que señalar la piedra y los sillares de cantería cortados a escuadra, la mayoría de ellos reaprovechados del yacimiento romano situado en las inmediaciones.

Hacia el siglo XIII, con la conquista de Estepa, la mezquita debió de dejar de tener un uso sagrado. Además, parte de ella fue destruida, conservándose hoy íntegramente el muro del fondo de la sala de oración y trozos de los muros laterales. Junto a ello, la mezquita conserva varios arcos de herradura y otros que han sido tapiados o convertidos en puertas que dan a otras dependencias del cortijo.

Para saber más:

Gozalbes Cravioto, Carlos (2006): El Cortijo "Las Mezquitas": una mezquita medieval en la Vega de Antequera. Málaga.

MEDIANERO SOTO, F. J., (2009): Turismo y patrimonio arqueológico: la comarca del Guadalteba. Universidad de Málaga, tesis doctoral, 230, 238, 276 y 619, inédita.

DECRETO 535/2008, de 22 de diciembre, por el que se inscribe en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz como Bien de Interés Cultural, con la tipología de Monumento, el Cortijo de las Mezquitas, en los términos municipales de Antequera, Campillos y Sierra de Yeguas (Málaga). 30/12/2008, 47.

Como no tengo muchas fotos, dejo este vídeo del edificio y su entorno, que se ve muy bien:

sábado, 9 de junio de 2012

baños de Jaén, hammam al walad, حمام الولد

El hammam al walad de Jaén datan de inicios del siglo XI (aunque aprovechan una edificación de origen romano) y actualmente pueden visitarse en los sótanos del Palacio de Villardompardo, situado en la Plaza de Santa Luisa de Marillac, s/n de esa ciudad. Su extensión de aproximadamente 450 metros cuadrados hace de ellos, probablemente, los más grandes de los se pueden visitar en España. Los restos de decoración almohade que se conservan en algunas de sus salas hacen pensar que fueron remozados hacia finales del siglo XII.


Fachada del Palacio de Villardompardo


Después de la conquista de la ciudad (en 1246 por Fernando III el Santo) continuaron en uso durante los primeros años de dominio cristiano, lo que me hace pensar que la población musulmana continuó viviendo en la ciudad (ya se sabe que los cristianos fetén no solían ser muy dados a eso de la higiene) hasta los siglos XIV y XV, cuando desaparece su función como casa de baños al establecerse una tenerías (tintes). Muestra de ello son los restos de sus instalaciones que aún se conservan en las salas templada y caliente.

A finales del siglo XVI, Fernando de Torres y Portugal, Conde de Villardompardo y Virrey del Perú, edificó su palacio sobre los baños, quedando una parte ocultos entre la cimentación y los sótanos, permaneciendo de esta forma hasta el s. XIX. Como ha sucedido en muchas otras ocasiones, este tipo de acciones, a la vez que destruye, permite que se conserven las estructuras más antiguas preservadas por la propia construcción, por ejemplo, el templo de Diana en Mérida.



A principios del s. XX, el palacio pasa a formar parte del patrimonio inmobiliario de la Diputación Provincial de Jaén, institución que, entre 1901 y 1903, libera el espacio de varias casas adyacentes al inmueble con el fin de construir una capilla para el Hospicio de Mujeres, obras que afectaron a los restos que aún quedaban de los baños. En 1913 fue descubierta una pequeña parte a raiz de una inspección. Algo más tarde, Manuel Gómez Moreno, Catedrático de Arqueología Árabe de la Universidad Central de Madrid, propuso el inmueble como Monumento Nacional. Propuesta que fue aceptada en 1931, declarándose los restos Monumento Nacional con el número de Registro General 528. En 1936 comienzan las obras de restauración bajo la dirección de Leopoldo Torres Balbás y  Luis Berges Martínez, pero las obras se pararon a causa de la Guerra Civil. En 1970 la Dirección General de Bellas Artes encarga el primer proyecto de restauración, al que se suceden otros, los últimos en 1980-82. En ese momento fueron descubiertas la mayor parte de las salas que hoy se visitan. En 1984, la Asociación Europa Nostra otorgó la Medalla de Honor de ese año a las tareas de restauración de los baños.



Las Salas que componen los Baños Árabes son las siguientes, (creo que los nombres no son los exactamente correctos, pero son los que aparecen por todas partes. De hecho, he puesto al gurfat, que es como se dice habitación en árabe)

Zaguán (gurfat al-maslaj, زغوان)

El vestíbulo de ingreso es una sala transversal de 14 metros de longitud por 3,80 metros de anchura, con alcobas en ambos extremos separadas del resto de la sala por arcos de herradura sobre medias columnas, esquema que se irá repitiendo en todas las demás salas. A ambos lados de la entrada se ubican sendas tacas. La sala está cubierta por bóveda de medio cañón y cuenta con dieciocho mawdas estrelladas.
El suelo estuvo revestido de mármol blanco y las paredes enlucidas y pintadas con decoración de arquerías en color rojo sobre fondo blanco.

Sala Fría (al-gurfat al-barida)

Contigua y muy similar a la anterior aunque de menor tamaño (11,4 m x 3,50 m.), esta sala también está cubierta por bóveda de medio cañón en la que se sitúan doce mawdas. La alcoba situada en el extremo derecho está cubierta con cúpula con cinco mawdas.

Sala Templada (al-gurfat al-wastani)

Consiste en un gran salón cuadrado de 11´30 m x 11,30 m que, a su vez, encierra otro cuadrado central, éste cubierto por una gran cúpula de casquete semiesférico sobre pechinas.

La cúpula no descansa sobre muros macizos sino sobre arcos de herradura soportados por ocho columnas. En las cuatro esquinas del gran salón quedan otras cuatro cúpulas menores, y los espacios restantes se cubren con cuatro bóvedas de medio cañón con tres mawdas en cada una de ellas.

Esta gran sala da paso, mediante dos arcos de herradura, a otra sala de 11,30m x 2,80 m que preside todo el conjunto y que está cubierta mediante bóveda de medio cañón; teniendo, sendas alcobas en los extremos cubiertas con cúpulas con mawdas.

Sala Caliente (al-gurfat al-sajum)

Con unas dimensiones de 15,90 m de longitud por 3,30 m de anchura, la sala caliente es muy similar a las salas anteriores. Está cubierta con bóveda de medio cañón con 15 mawdas y con sendas alcobas en los extremos con 5 mawdas cada una de ellas. Esta sala está situada junto a las calderas donde se calentaba el agua. Sus muros están recorridos por chimeneas ocultas por las que circulaba el aire caliente.

En el centro de la sala, un gran arco abocinado la separa del lugar donde estaba la caldera. A ambos lado de este arco central, dos pequeñas estancias, contienen: una, un baño cuadrado de asiento y la otra, dos tinajas.

Bajo su suelo de piedra, toda la estancia está hueca: numerosos pequeños pilares de ladrillo lo soportan, permitiendo que circule el aire caliente que, por su tendencia natural, sube y se adhiere al suelo, calentándolo.

En el siguiente vídeo está el trabajo que ha hecho el Departamento de Ingeniería Gráfica de la Universidad de Jaén, una estupenda reconstrucción virtual del aspecto que tuvieron, según los datos obtenidos de las distintas excavaciones y restauraciones que se han hecho en los baños.

martes, 5 de junio de 2012

Ribat de Arrifana, Aljezur (Algarve, Portugal) ribāṭ رباط

La palabra ribat, procede de la raíz árabe r-b-t, que tiene un significado general de “atadura” o “unión”. Como verbo viene a significar “estar atado, perseverar, establecerse en un lugar o tomar posiciones”. Es una palabra, entonces, de significado plenamente religioso. De hecho, en el árabe actual significa “atadura, lazo, vínculo” y como edificio es “fortaleza, posta, hospicio, fortificación”. Rábita sería la castellanización y rápita la catalanización de ese mismo término conservando las tres letras radicales (esto para quien estudie árabe...). Además están relacionadas las siguientes palabras árabes: ribat, rivate, munastir/al munastir, murábit/morabito y záwiya.
El ribat de Arrifana es un asentamiento religioso-defensivo situado en una elevación sobre el océano Atlántico -en la península Ponta da Atalaja, a unos 6 kilómetros de Aljezur-, en la localidad de Arrifana (Aljezur, Algarve, Portugal). Las fechas de ocupación van desde el 1130 a 1151, o sea, durante el periodo almorávide y la primera etapa almohade. Es el segundo ribat conocido y excavado de al Andalus y fue creado por el maestro sufí Ibn Qasi*, citado en fuentes islámicas escritas (el primero es el de Guardamar del Segura, Alicante). El ribat es una institución ligada a la guerra y a la vida religiosa que produjo diversas estructuras materiales, la mayoría todavía sin reconocer y por lo tanto, no han sido plenamente estudiadas.


Después de la limpieza del yacimiento, se han podido identificar los restos arquitectónicos de tres mezquitas, con sus respectivas quiblas y miharabs -debidamente orientados a La Meca- un conjunto de alcobas y oratorios. Estas estructuras demuestran el uso jerarquico del espacio: seguramente una de las mezquitas era usada por el maestro y sus seguidores más directos, mientras que el resto de los ocupantes dispondría de los espacios menos espectaculares.


Se han localizado piezas metálicas (un amuleto de cobre decorado, agujas para tejer o para reparar redes, argollas de cotas de malla, punzones, restos de empuñaduras de cuchillos, puntas de lanzas etc.) además de las cerámicas citadas: vidriadas y de cuerda seca. Igualmente se han recuperado piezas decorativas, como una cuenta de collar esférica de cornalina y algunos útiles óseos. Entre la fauna localizada hay gran cantidad de “concheros” (acumulaciones de las conchas de diferentes especies de moluscos marinos -sobre todo una especie de mejillón de pequeño tamaño muy conocido para aquel momento-), algunos huesos de aves y muy pocos de animales quedebieron servir de alimento a la comunidad de morabitos que vivieron aquí. Junto a pequeños fuegos aparecen gran cantidad de fragmentos de cerámica de cocina (marmitas, pequeñas cazuelas) y de mesa (jarras, redomas, jarritas etc.) así como alguna vasija de almacenamiento. La cerámica es el material más significativo pues sirve para datar el yacimiento y averiguar su procedencia (cuanto más lejana, más poder ostenta el que la tiene) También aparecen algunas tapaderas y lucernas, cuya importancia real y simbólica es muy importante para estos centros. Hay también algunos objetos asociados al juego y textos escritos en fragmentos de tejas, trozos de metal y otros soportes, que son testimonio de la actividad religiosa.


Es decir, toda una serie de objetos -bien conservados. además- que han permitido identificar las actividades que en aquel centro se llevaron a cabo y que estaban vinculadas a las actividades cotidianas más relacionadas con la alimentación y la artesanía que con la vida militar.


El ribat se ocupó en torno al año 1130 y fue abandonado alrededor 1151, tras el asesinato del líder espiritual y fundador del mismo, Ibn Qasi. Sus seguidores fueron perseguidos también, por cierto. Tal vez las 21 sepulturas que se han localizado son las suyas. Curiosamente tanto el ribat de Guardamar como éste muestran algunas similitudes y unas características propias que los diferencian de los ribats (o rebatos) norteafricanos y orientales: su ubicación en una península junto del mar, la forma y las dimensiones de algunas de sus mezquitas.

El ribat de Arrifana se volvió a ocupar, tras de un período de abandono, durante el siglo XIV y principios del siglo XV. La mezquita fue modificada y los restos del alminar se usaron como torre de vigilancia, dando origen al topónimo con el que la localidad se conoce hoy en día:


En la misma localidad de Aljezur se encuentra el Povado Islamico Sazonal de Pescadores (asentamiento islámico para la pesca de temporada). Este asentamiento de pescadores del siglo XII se encuentran en Ponta do Castelo, cerca de Sagres. En él se localizaron diversos instrumentos de pesca, cerámica y restos de fauna (peces y herbívoros). Aquí esta:


Abu-l-Qasim Ahmad ibn al-Husayn ibn Qasi fue un líder político sufi que estuvo al frente de la oposición contra la dinastía almorávide en Al-Garb al-Andalus. Gobernó la Taifa de Mértola. Nació en Silves y murió (asesinado) allí mismo en 1151. Fue amigo de Ibn al-Arif de Almería. Ibn Qasi escribió un tratado que se titula algo así como "a la eliminación de las sandalias", sobre su filosofía, el sufismo y la Historia.



Para saber más:

Revista Portuguesa de Arqueología, vol. VII, nº 1 (2004), pp. 483-573. 

EL CASO DE LOS EREMITORIOS FORTIFICADOS MUSULMANES: EL RIBAT EN LA EDAD MEDIA PENINSULAR,  © Pascual Ruiz Martínez Este enlace es muy interesante, ya que trata asuntos relacionados con la vida cotidiana en estos centros, entre otras cosas.

Está prevista la creación de un centro de interpretación del yacimiento para el 2013, pero me temo que antes le darán los dineros a las escuelas de surf que hay por allí, por aquello de atraer a más turistas...

viernes, 27 de abril de 2012

La red de Fars de Catalunya

Entre las ciudades de Narbona y Barcelona existen una serie de construcciones en forma de atalaya o torre de planta circular, con carácter defensivo y de vigilancia del territorio, que se conocen como Fars. Aunque tradicionalmente se les había atribuído factura romana, se ha documentado recientemente (2008) su origen andalusí.

Tales torres se han interpretado como un elemento fundamental en la defensa de la frontera occidental islámica, organizada directamente desde Damasco. Están dispuestas de manera bastante regular cada 10/25 kilómetros, dependiendo de la orografía. Su factura, en cuanto a técnica constructiva y dimensiones, es semejante en todas ellas: entre 8/10 m. de diámetro y bases macizas, probablemente un piso superior y una azotea.

Además, tienen un evidente carácter de marcador territorial, como puntos de referencia, especialmente si se transita por la Vía Augusta desde los Pirineos a su paso por el corredor prelitoral catalán. Se ha detectado una estructura en dos ejes, uno principal de torres monumentales y una secundaria con puntos de guardia dependientes de las torres principales, todas ellas con interconexión visual. También recientemente (2008) se ha podido documentar que esta red de fars o atalayas permanentes se extienden por todo Al Andalus, especialmente en el tercio norte peninsular.

Veamos algunas de las torres principales, de sur a norte:

1. Far en Bellveí, Baix Penedès. La más meridional, en contacto con la comarca de Tarragona.

2. Ipso Faros, en Barcelona, justo donde hoy se eleva el Palacio de Montjuïc.

3. Torrasa del Moro o del Far, en Llinars del Vallés.

4. Torre de la Mora o del Far en San Feliu de Buixalleu.

5. Torre del Far en Santa Coloma del Forners.

6. Ipso Far en Llagostera.

7. Santuari del Far en Sant Martí Sacalm, una de las atalayas claves por su emplazamiento, aquí está una vista desde el mismo:


8. Puig del Far en Tavérnoles, para controlar toda la planicie de Vic.

9. Ipso Far de San Feliu de Pallerols, en la divisoria de los ríos Ter y Fluvià.

10. Castellot de Falgars o del Far en Beuda, para controlar el Ampurdán, el valle del Fluvià y parte de los Pirineos Orientales, uno de los fars más impresionantes por su emplazamiento.

Sufrido proceso de excavación en el far

Vista desde el Castellot

11. Far d'Empordà en Alt Empordà, que no está demasiado elevado, pero que el cerrete donde está ubicado le otorga control total sobre el llano ampurdanés.

12. Torre del Far de Talteüll, para tener control visual entre los distritos de Narbona y los Pirineos:



Yo imagino que funcionarían tal como se ve en la escena de las almenaras de la peli El retorno del rey, que además es una de las más bonitas... y por eso la pongo aquí, hala.

   


Para saber más:

Martí, R. ed. (2008): Fars de l'islam. Antigues alimares d'al Andalus. Edar, Barcelona. 

Lecanda, A.; Lorenzo, J. y Pastor, E. (2008) "Faros y torres circulares. Propuestas para el conocimiento de la efectividad del dominio islámico inicial en los territorios del alto Ebro". Fars de l'islam. Antigues alimares d'al Andalus. Edar, Barcelona.

sábado, 24 de marzo de 2012

Aljibe mayor del castillo de Trujillo, الجيوب

En este caso, me permito enlazar esta completísima entrada del blog Extremadura, caminos de cultura. En ella se describe minuciosamente este elemento, el aljibe mayor del Castillo de Trujillo, en la provincia de Cáceres, datado en el periodo califal de Al Andalus. Toda una lección:


¡Para conocerlo bien!

miércoles, 14 de marzo de 2012

almacabra de Ávila, مقبرة


En todo el mundo islámico se mantienen la vieja tradición de marcar las sepulturas, aunque no sea ésta una práctica que encaje con la más estricta ortodoxia. Esa costumbre ha permitido localizar en Ávila la existencia de la almacabra o cementerio musulmán, del que hay noticias escritas ya en el siglo XVII.

Pero los datos más llamativos provienen de una excavación llevada a cabo entre los años 1999 y 2003, al suroeste de la muralla -entre la iglesia de San Nicolás y el rio Adaja-, que sacó a la luz más de tres mil (3.000, sí) enterramientos islámicos, según la orientación de los restos y el modo de estar depositados los cuerpos: decúbito lateral derecho.

Este trabajo además, implicó la entrega -al Museo de Ávila- de una serie de estelas funerarias que, añadidas a las ya guardadas en el museo, forman un conjunto único de estelas funerarias mudéjares. Muchas más aún se encuentran por todo Ávila, tanto en edificios antiguos y muros o como elementos decorativos, porque tras la conversión forzosa de los mudéjares en 1502, el cementerio se abandonó y sus estelas se reutilizaron como elementos constructivos por toda la ciudad. Por ejemplo, el horno que se construyó en los siglos XVI o XVII en el mismo lugar del cementerio (la Huerta del Vado), utilizando únicamente las estelas. Este horno fue hallado en otra excavación hecha en el año 2003 y se desmontó y trasladó hasta el Almacén Visitable del Museo de Ávila, que es la iglesia de Santo Tomé el Viejo.

Las estelas funerarias están hechas en granito y algunas de las que llevan decoración, presentan motivos inspirados en modelos cristianos (bolas, rosetas, arcos ciegos de medio punto, sogas...) mientras que otras presentan epigrafías en árabe con citas del Qurán, como la Estela B 32 cuyo texto es el siguiente: Todo perece excepto su Rostro, Él tiene la Sabiduría y a Él retornaréis (Corán XVIII,88), por ejemplo. Incluso algunas muestran medias lunas crecientes y estrellas y no se descarta que muchas de ellas tuvieran textos pintados, como lo prueba la orden de Felipe II en 1574 de borrar todas las inscripciones árabes que existieran... Más curioso aún es que hay motivos (boceles, zig-zags y escamas) que aparecen también en sepulcros cristianos de la misma época.

Todo este conjunto, por sus características, parece indicar que la población mudéjar de Ávila estuvo muy relacionada con la de Toledo. Es decir, que no se trataría de población asentada desde la epoca andalusí, porque no se han localizado -de momento- elementos arqueológicos que permitan afirmar que Ávila fuera una ciudad andalusí, sino que se trataría de personas que marcharon de Toledo ya desde finales del s. XII, al ver sistemáticamente incumplidos los acuerdos de rendición por parte de los gobernantes cristianos (¡vaya, qué novedad, gobernantes incumpliendo acuerdos...!)

Además del Museo de Ávila, pueden verse estas estelas en el Convento de Santa Ana y en la iglesia de Santiago.

Ejemplo de una de las estelas: la B 32, que muestra el texto citado antes a la vez que motivos goticos, las rosetas.






Para saber más:


Y sabiendo que no queda tiempo casi ya, porque termina el 18 de marzo, visita a la exposición Mudéjares y Moriscos de Ávila

Un apunte más, hace muy poco tiempo he podido conocer la receta de un dulce de la zona atlántica marroquí, la Beilba jaluat, que se cocina y tiene exactamente el mismo aspecto, sabor, color y textura de las yemas de Ávila. Dejo el enlace con la receta y muchas cosas más: Nueva cocina marroquí: Beilba jaluat

martes, 6 de marzo de 2012

Una vista de la muralla emiral de Madrid


[EDITO.- esta vista de Madrid es una obra de Pierre Schild, pintor escenógrafo de origen ruso que trabajó para el cine, pintada en los años 50 del siglo XX y que actualmente está en el restaurante Casa Botín. Representa de manera muy certera una vista de Madrid en torno a 1561, en la que se puede apreciar perfectamente la puerta de la Vega y el acceso a la villa desde la Cuesta de la Vega. También se aprecia el edificio del qsar (al qasr), o sea, el Alcázar. En la hemeroteca digital del Blanco y Negro aparece la siguiente noticia:]



Esta puerta de la Vega vendría a estar en la confluencia de las calles Mayor y Bailén y en esta imagen se ve el lienzo perteneciente a la muralla emiral, que es el pintado de color gris y con la torre cuadrada justo en la posición que aún puede apreciarse en el Parque del Emir Muhammad I:


Para mayor curiosidad, el mapa con las murallas de Madrid:


Ver Murallas, cercas y puertas de Madrid en un mapa más grande

domingo, 22 de enero de 2012

La almunia del Hospital de Córdoba, قرطبة

La entrada de hoy va a servir de crónica para anunciar la destrucción de un yacimiento. Destrucción perpetrada por las autoridades responsables de su conservación, nada menos. Un engaño publicado y cuya prueba será un murete aislado y descontextualizado del resto de las edificaciones que ya han arrasado.

La almunia califal del hospital Reina Sofía es sólo una pequeña parte de los restos de arrabal encontrados en este solar…y una pequeñísima parte de los arrabales occidentales excavados en toda esta zona de la ciudad (salvajemente expoliados) que la Plataforma Ciudadana en Defensa del Patrimonio Cordobés incluyó en su solicitud de BIC,  presentada al Ayuntamiento y la Junta de Andalucía (con ninguna respuesta a este respecto, por cierto). Esta acción es el penúltimo capítulo de un genocidio patrimonial en que se han empeñado entusiásticamente desde hace 30 años las fuerzas políticas de Córdoba: 1.500.000 m2 en los últimos cuatro años (desde 2006) de yacimientos cuidadosamente excavados y seguidamente minuciosamente destruidos. Ni un sólo metro cuadrado puesto en valor, con las repercusiones económicas positivas que ello hubiese conllevado. En una ciudad patrimonio de la Humanidad, además.

La Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Córdoba solos o en compañía de otros no sólo se han cepillado esto:

Sino también esto:
Y esto:
Y esto:
Y esto: