jueves, 24 de marzo de 2016

Biblioteca andalusí de Tombuctú

Una buenísima noticia:

Se han entregado los primeros 23 manuscritos (150 legajos) del Fondo Kati, es decir, la Biblioteca Andalusí de Tombuctú a la asociación local Savama para digitalizarlos (tardarán unos 25 días en hacerlo) y algo más tarde, serán expuestos en 2017 para conmemorar el 550 aniversario de la marcha del juez Ali ben Ziyad al Katí con los primeros manuscritos que dieron lugar al fondo.

El siglo XIX en Mali fue difícil y los Kati distribuyeron su biblioteca entre los miembros dispersos de su clan. Los manuscritos se escondieron en aldeas perdidas, donde continuaron a salvo del expolio que el colonialismo francés sometió a otras bibliotecas. A finales del s. XX, la tradición oral, tan arraigada en comunidades tribales, facilitó a Yayé Diadié, patriarca del clan, la reunificación de los manuscritos. Se habían salvado del hombre, pero no de los insectos, los incendios, las inundaciones y las inclemencias de una conservación precaria. La historia de la familia Kati y la de su biblioteca se entrelazan y se confunden. Una y otros han sufrido convulsiones, saqueos y desastres. La biblioteca se ha reducido, pero cuenta hoy con unos 3000 manuscritos.